El estado actual del área extenso quemado depende de donde se mire
La mayoría de los miembros de CSERC entienden que el paisaje quemado del Incendio Rim de 2013 es tan grande y tan diverso, ninguna descripción sola de su estado actual es precisa.
En las zonas con hierba y con chaparral en elevaciones bajas y en el cañón del Río Tuolumne, vegetación brotando de nuevo se ha convertido colinas denudadas a hábitat seral de etapa temprana sobre todo saludable. En las áreas más extremamente quemadas donde donde los bosques de coníferas fueron incinerados, la falta de piñas y semillas sobrevivientes significa que pocas plántulas de coníferas están brotando en medio de la cubierta vegetal. Sin reforestación, muchas áreas no serán bosques de nuevo durante tal vez un siglo, o más.
El personal de CSERC apoyó la tala de árboles peligrosos a lo largo de caminos que plantean un riesgo para la seguridad pública. También apoyamos firmemente la tala de rescate de árboles muertos en las áreas con menos controversia. El Bosque Stanislaus presentó originalmente un plan para vender 660 millones de pies tablares de árboles muertos. CSERC trabajó estrechamente con otros grupos de conservación, y la industria de madera para ayudar a crear un plan reducido a escala que sólo permite 210 millones de pies tablares de rescate a ser talados. Como resultado, la mayoría de las laderas empinadas más vulnerables fueron eliminados de los tratamientos de tala. Un promedio de 4 grandes árboles muertos se dejan en cada acre. El plan de compromiso permitieron la extracción de parte de la enorme cantidad de combustibles muertos mientras todavía tenía valor como madera. Esto significa que los contribuyentes no tienen que pagar para la eliminación de los combustible en el futuro.
Sin embargo, a pesar del acuerdo de tala de rescate basado en el consenso que el Servicio Forestal adoptó, tres organizaciones ambientales no de la región local presentaron una demanda. Su principal argumento fue que la tala de rescate sería negativa para el búho manchado de CA. CSERC apoyó la avanza del proyecto de tala, señalando que los biólogos del Servicio Forestal había incluido muchas medidas de protección, incluyendo ningunas talas en los Centros de Actividad Protegidos y dejando intactas vastas áreas quemadas. La corte falló a favor del Servicio Forestal, aceptando que la Agencia cumplió con todos los requisitos legales.
Sin embargo, como muchos problemas medioambientales, la realidad en el terreno no es blanco o negro. En áreas donde los árboles peligrosos fueron eliminados, gran cantidades de árboles muertos pequeños no peligrosos y robles muertos también fueron talados y apilados, en lugar de ser dejados para beneficios de la cuenca hidrográfica y la vida silvestre.
Tratamientos de rescate en tierras privadas eliminaron casi todo en lugar de dejar mucho material leñoso para ayudar a sostener el suelo cuando las tormentas finalmente vienen. En las áreas donde el Servicio Forestal está realizando talas de rescate, hay beneficios de reducción de combustibles y impactos negativos de agitar el suelo. Como CSERC ha observado, los tratamientos que se hacen en el Incendio Rim son una mezcla de compensaciones. En futuros planes de reforestación, es probable que también van a ser resultados positivos y negativos.